jueves, 22 de abril de 2010

Las nuevas tecnologías nos hacen más...?

He estado un par de días en Madrid por temas profesionales. También ha habido tiempo para el "recreo" y los intercambios de frivolidades textiles (gracias guapa!!) de esos que suben el ánimo.
Pero el post va de un tema tangencial a mi viaje: los taxistas.
Siempre me había parecido digno de asombro la capacidad que tenían los taxistas para conocerse el callejero al completo de las ciudades en las que trabajaban. No sólo el callejero, sino también las rutas óptimas según el día y hora, de forma que con subir al taxi y decir: "Calle Valldonzella esquina Johann Sebastian Bach", podías despreocuparte del trayecto y esperar tranquilamente a llegar a tu destino.
Durante mucho tiempo me he movido en coche por mi ciudad, y he llegado a tener un conocimiento amplio de su callejero, pero limitado a mis zonas habituales, lo que hacía que me maravillara ese sentido de la orientación de los profesionales del taxi. Porque además uno no se sienta en su casa y dice: "voy a aprenderme las calles de Barcelona. Todas!".


Pues bien, estos dos días entre Madrid y Barcelona, he utilizado un taxi en seis ocasiones. En todas ellas, sin excepción, el taxi llevaba incorporado un GPS, además de los que hablan. En los trayectos al aeropuerto me ha sido posible sustraerme a sus frases monótonas, pero el resto de ocasiones he tenido que esperar a que introdujeran la dirección (en un caso mediante reconocimiento de voz, sin identificar siquiera la población inicialmente: parece que "La Florida", con su palacio de la Zarzuela incluido, no se acaba de identificar si es Pozuelo de Alarcón, Aravaca, Majadahonda o Madrid. Y oir al menos 10 veces chillarle al aparatejo: "CALLE DE BASAURI", acaba siendo incómodo :)).


Antes subía al taxi y pensaba: "Sabrá dónde cae mi lugar de destino?". Ahora pienso: "Tendrá voz de hombre o de mujer el aparatejo?"


Ir en taxi ha perdido el encanto que antes tenía. La admiración que me provocaba el dominio callejeril ha dejado paso al hastío de las voces electrónicas indicando cada 200 metros hacia dónde hay que colocarse, girar, parar y demás...
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SUS...PIRO

Tanto aire exhalado sin sentido... intentaré hacer algo productivo con él y convertirlo en palabras.